han pasado ya 11 años desde que escribí ésto, y sigo sin respuestas, será el resultado de los años,
SEPTIEMBRE 23 –2002
Hoy quiero hablar de la muerte y de la vida,
es curioso, durante 6 martes, estuve manejando, liderando, dando, preparando y
gozándome el curso de preparación para el parto, me colaboró una estudiante
pequeña y menudita de último semestre, quien
era la encargada de la gimnasia que sirve para entrenar los diferentes
músculos y estructuras óseas que intervienen en el momento del parto, también
la parte del entrenamiento respiratorio, se agruparon mujeres de diferentes
edades, algunas primigestantes, otras muy
jóvenes y con varios hijos, pero todas con sus vientres redondeados, sus ojos
chispeantes, sus senos palpitantes y su “andado de pato” “lordosis lumbosacra”,
no obstante las incomodidades del lugar, asistieron a las 6 sesiones teórico prácticas y nos gratificaron
con su presencia, con sus sueños, con
sus miedos, con sus expresiones de sorpresa cuando veían los diferentes videos,
saben cuando se es enfermera, tu tienes la posibilidad de compartir experiencias vivenciales,
edificantes, tu hablas del binomio madre hijo, tu palpas la vida naciente a través de su vientre, cuando tu junto a ella
y a veces junto a él, experimentas el
goce de la caricia de un vientre henchido, cuando tu escuchas y ves a esa mujer
estimulando a su bebé, cantando, meciendo, acariciando, tocando, sintiendo a
ese bebé que pronto llegará, cuando el último día entusiasmadas recibían su
diploma de asistencia que será el primer escalón de una escalera infinita de lo que significa ser madre.
En
simultánea estoy asistiendo a un curso de “tanatología” que dura dos meses y auspiciado
por la Academia Nacional de Medicina, el
Instituto Colombiano de Estudios
Bioéticos y la Fundación pro Derecho
a morir dignamente, se habla de la
muerte en sus diferentes visiones, la visión
bio antropológica, la visión
psicológica, la visión espiritual, uno piensa que se va a entristecer y es todo
lo contrario, empiezas a palpar el
privilegio de estar vivo, quiero mencionar frases utilizadas por los diferentes
expositores, la mayoria personas mayores de 60 años, médicos, enfermeras, filósofos,
abogados,
“estar
vivo es suficiente y es un milagro”
“la
muerte es lo que nos hace palpable el sentido de la vida”
“la
muerte es un episodio de la vida, el episodio final”
y ahí
te recuerdo a ti Daniela, con tus 22 años, con tu timidez, regresaste, te conocí hace unos años cuando eras una niña y empezabas la carrera y
te escuche decir que lo que más te gustaba era la medicina forense, te encantaba
visitar los anfiteatros y “ ver muertos”,
que de niña te encantaba acompañar a tu mamá a las salas de velación sólo por
mirar a los muertos y luego leí tu tesis titulada “ significado que tiene para
la enfermera el manejo del proceso del
duelo anticipatorio en el cuidado del paciente paliativo” hecha en el año
2001, y entonces leí la definición de
cuidado paliativo “no sólo abarca bienestar fisico, sino también aspecto
emocional, social y espiritual de paciente, paliar significa aliviar las
fatigas del cuerpo o aflicciones del alma, destinado a aliviar el sufrimiento cuando curar es
imposible” y entonces me contaste como
aplicaron un instrumento con preguntas abiertas a enfermeras que trabajan en
una unidad de cuidados paliativos y después aplicaron observación directa de
éstas mismas profesionales, éste proceso se llama captación intuitiva, entre las preguntas recuerdo
“describa
como ha sido su experiencia con el cuidado de pacientes terminales?”
“narre
lo que usted realiza cuando se ve enfrentado al duelo anticipatorio del
paciente en cuidados paliativos”
“Es
importante hacer parte del proceso de la
muerte del paciente de cuidados paliativos y porqué?”
Entonces
me acordé de la señora de unos 70 años, muy vital ella, que participó en el taller de tanatología, y que fue decana de la facultad
de enfermería cuando yo era estudiante , me la encontré antes, cruzamos saludo,
comentarios, recuerdos y me abrazó, cuando yo era estudiante nunca lo hizó, ya no la veía distante, la sentía
cercana, serían los años de las dos, las canas, los kilos de más, en fin, ella
habló “de la insensibilidad del profesional de la salud, es tal?” “es una
careta?” “es miedo?” “que és”? a mí me
recomendaron no involucrarme
emocionalmente en esos momentos de duelo, pero no pudé, ahora se dice que el
profesional puede expresar más sus sentimientos, llorar,, abrazar, apoyar
Ella
habló de la tecnología blanda, de que alguien planteó colocar música en las
unidades de cuidado intensivo, y algo importante habló del cansancio de los
cuidadores de pacientes terminales y de los dilemas éticos de la enfermera,
como son: retirar liquidos endovenosos, y el código del no resucitar
Esto
lo complementó u médico cuando habló de
la muerte incierta los llamados “estados vegetativos” tú papá... estarías en
muerte cerebral..., muerte cerebral es la muerte del ser humano, se diagnóstica
por lesión comprobada, coma profundo, ausencia de reflejos del tallo cerebral y
apnea persistente, y en muerte cerebral
se puede retirar ya el respirador y retirarle el ventilador no es darle muerte,
es reconocer su muerte”, y tú papá cuando yo te hablaba y te tomaba de la mano
y tu la apretabas, y sentía tu calor, tu presión, me escuchabas? Algunos
dirían “reflejos del tallo cerebral aún
persisten” yo prefiero pensar era la forma de demostrarme tu amor, de recibir
tu aprobación, era tu despedida... y tu Daniela, la niñita de gafas, de largos
y rubios cabellos, de una seriedad prematura, con un halo de nostalgia, me dijo un día que al fin pudó ver la muerte no con la curiosidad infantil
por el cadáver, sino como parte de un
equipo de salud, que se enfrentaba al último acontecimiento social del ser
humano, que al fin pudo llorar, abrazar y sentir el dolor de la partida, no
sólo de un cuerpo, sino de un ser integral, que tenía mente, alma, emociones y
todo lo demás...
No
quiero cansarlos más con éste tema, pero no puedo dejar de mencionar tres
aspectos que me llamaron poderosamente la atención: el duelo ante la muerte,
que dice la constitución de 1991 al respecto, y la cultura de la muerte.
Bueno
ella dice la expositora, es una joven abogada de unos 30 años, dice “
la corte se pronuncia ante la eutanasia y ella
se atreve a decir, y digo se atreve, porque causó polémica su intervención “uno tiene derecho a la vida o una
obligación de vivir?”
la
corte dice “no existe la obligación de vivir” pero jurídicamente es “dejar espacios para que decida” dice la
ponente. “ya que la vida no se puede equiparar a la supervivencia, sino a una
vida digna”, habla de eutanasia activa en la que actúa un tercero pero con
consentimiento en un estado terminal y éste tercero debe ser médico” se
penaliza o no se penaliza?...
dice
en la práctica no se tuvó en cuenta a los médicos, pero corte dice “yo no puedo
definir terminal” y refirió el caso al legislador, pero éste no reglamentó y
retiró la ponencia
Lo
que si es claro es el Decreto 1546 que habla de la donación de órganos , se debe estar los suficientemente vivo y lo
suficientemente muerto” debe mediar una autorización, consentimiento escrito
del donante o de su familia más cercana, con dos testigos y dejar constancia en
la historia clinica.
¡”el
órgano debe estar prefundido, vital, por
eso se recomienda haber declarado muerte
encefálica por lo menos 12 horas antes”
y habla de las condiciones del donante, enfatiza en el buen soporte
ventilatorio.
Y
luego se habla del duelo ante la muerte, de la importancia de elaborar el duelo, ella habla de los momentos del duelo como son la negación,
la anestesia emocional, etc. Habla de “como los funerales tienen sentido” ya
que ayudan a procesar la ruptura, la despedida y menciona algo que estremece al
auditorio como son las penas que no tienen espacio social, como las pérdidas
afectivas de los amantes, de las personas con orientación homosexual , que no
pueden hacer público su duelo y se lo guardan, el dolor va por dentro, oh
Dios...
Y por
eso todos los asistentes guardamos silencio, cuando apareció aquel simpático
médico de unos 65 años, que empezó su conferencia diciendo” Que es la muerte?,
es una realidad, es un misterio, es un enigma, es un fin, es una ruptura o
acaso una quimera o un absurdo?”
Dijó
que había visitado una veintena de cementerios a asistido a unos 70 funerales
para venir a hablarnos, habló de la soledad del moribundo, pero también habló
de los privilegios del muerto “no hay
muerto malo” “ y no tiene que preocuparse de la inflación, de la devaluación,
de los impuestos”
Además
por cada muerto se generan 50 empleos, hagan la cuenta, conclusión “el bazar de
los muertos” “ y que hay más allá de la
vida?” “ y que hay más allá de la
muerte?”
“el
túnel de luz, el reencuentro con
aquellos que se fueron antes, el encuentro con ese ser superior....y la luz”